viernes, 31 de diciembre de 2021

En La Brecha

Páginas de viejo libro
Estimados amigos blogueros, se acaba un año apasionante en el que la vida me ha brindado de nuevo el placer y disfrute de hacer lo que más me gusta, trabajar de asesor inmobiliario con el público en general es un acontecimiento nuevo cada día por que cada persona es distinta, cada sensibilidad es distinta, cada maravilla es distinta. Ha sido un año repleto de anécdotas, (enriquecedoras todas ellas) relacionadas con cada una de las historias de cada uno de mis clientes de tal forma que me hacen aprender y saber del buen corazón y calidad humana de mucha gente.    

Dijo Viktor Frankl en su conmovedor libro. El hombre en busca de sentido, que «No hay nada en el mundo que capacite tanto a una persona para sobreponerse a las dificultades externas y a las limitaciones internas, como la consciencia de tener una tarea en la vida.» desde mi humilde comparación así me siento yo cada día.

Estimados amigos, nada es eterno, por eso: No hay que perder los pies del suelo en las glorias. Ni creerse los fracasos. Recordar que existe el karma y que lo que uno siembra, lo cosecha aquí. Todos los momentos pasan y lo que no aprendemos a la buena, tarde o temprano lo enseñará la vida, a su propia forma... La vida será la que mejor haga asimilar la lección. Hay que amar con intensidad. Pedir perdón y perdonar en vida. Vivir el presente e ir detrás de los sueños y cumplirlos. Tomar la opción y decisión a diario de ser feliz mirando el lado bueno de la vida.

Realmente quiero decir que estoy súper agradecido a todos mis exclusivos clientes por la plena confianza depositada en mi trabajo, quiero agradecer a todas las personas colaboradoras, proveedores, compañeros de acciones compartidas etc …. al fin y al cabo, de alguna manera están todas ellas relacionadas con mi proyecto inmobiliario y me ayudan, acompañan a ir salvando etapas, periodos que en algunos momentos son difíciles y muy duros pero que al final con perseverancia, esfuerzo, disciplina mental y regularidad en los hábitos hacen posible que las experiencias sean maravillosas mirando en perspectiva los avatares reales de resultados. “Todo un privilegio” labrado surco a surco durante años. 

En la BRECHA
Desde aquí os deseo a todos un próximo año de los “tres patitos” cargado de nuevas y renovadas emociones, salud mental, salud física y un digno trabajo. Que el amor sea la fuente donde la reconciliación sincera y el sentido común se impongan a la sinrazón el egoísmo y la maldad. Yo procuraré estar siempre en la brecha atendiendo las señales ocultas que me propone el día a día. ¡¡¡¡¡Gracias por estar ahí!!!!!

Con cariño. Un fuerte abrazo. A.Y   

 

martes, 30 de noviembre de 2021

El Pozo

Estimados amigos blogueros qué de vez en cuando os dejáis unos ratitos de lectura y reposo por aquí, hace unos días tuve la oportunidad de leer algo que aquí os comparto, se trata de esta maravillosa fábula del burro, con el fin de que pueda ayudar a intentar buscar y encontrar una salida en los momentos más difíciles o simplemente hallar la motivación que nos permita seguir adelante por difícil que esté la cosa. Dice así…

Un día un burro se cayó en un pozo...

El animal lloró fuertemente por horas, mientras un campesino trataba de buscar algo que hacer.

El campesino consideró que el burro ya estaba viejo y el pozo al estar seco necesitaba ser tapado; no valía la pena sacar al burro del pozo.

Llamó a otros campesinos para que lo ayudaran. Cada uno agarró una pala y empezaron a tirarle tierra al pozo...

El burro se dio cuenta de lo que estaba pasando y lloró horriblemente.

Para sorpresa de todos, se aquietó después de unas cuantas paladas de tierra.

El campesino miró al fondo del pozo y se sorprendió... con cada palada de tierra, el burro estaba haciendo algo increíble: Se sacudía la tierra y daba un paso encima de la tierra.

Muchas personas se sorprendieron al ver cómo el burro iba llegando hasta la boca del pozo, pasó por encima del borde y salió trotando.

La vida va a tirarte tierra, hasta lodo...

El truco para salir del pozo es sacudirse todo lo que te cae encima (sin haberlo pedido inclusive) y usar todo ello para dar un paso hacia arriba.

Cada uno de nuestros problemas es un escalón hacia arriba.

Podemos salir de los más profundos huecos si NO nos damos por vencidos.

¡Usa la tierra que te echan para salir adelante! ¡Sacúdete y PA´ LANTE!

Y si cuando caíste te raspaste, pues levántate, sacúdete, ¡cúrate los raspones y PA´ LANTE!

¡No importa cuantas veces caigas en la vida, lo que importa es que tan rápido te levantas vas PA´ LANTE! Te darás cuenta que la fortaleza está dentro de nosotros, de nuestros pensamientos de nuestra capacidad para la energía y ganas de salir del pozo en el que te puedas encontrar, no importa el nombre del pozo ni de los que alimentan el pozo, no importa el tamaño del pozo ni tampoco las barreras que se tengan que superar. 😉

"Desde Sta. Cruz de la Palma, el volcán"
 

Ánimo para todos los que de alguna manera lo estén pasando mal. - en este momento me estoy acordando, por ejemplo, de los afectados por el volcán de Cumbre Vieja en la Isla de La Palma.

Un abrazo para todos. A.Y.

 

sábado, 23 de octubre de 2021

Situaciones equivocadas, parálisis. "Estado temporal de inmovilidad"

Llegó a mi este enfoque del principio del cambio que no llega nunca, quizá sea digno de revisar la decisión o indecisión del sapo.

"Si agarras un sapo, lo pones en una olla con agua y llevas al fuego, observarás algo interesante: el sapo se adapta a la temperatura del agua, permanece dentro y continúa adaptándose al aumento de temperatura.

Pero cuando el agua llega al punto de ebullición, al sapo que le gustaría saltar de la olla, no puede. Porque está demasiado débil y cansado debido a los esfuerzos que ha realizado para adaptarse a la temperatura.

Algunos dirían que lo que mató al sapo fue el agua hirviendo... en realidad lo que mató al sapo fue su incapacidad para decidir CUÁNDO saltar.

 Así que deja de "adaptarte" a situaciones equivocadas, relaciones abusivas, amigos parásitos y muchas otras cosas que te "calientan". Si continúas adaptándote, corres el riesgo de "morir" por dentro.

¡Salta apenas puedas!